El alma de Moira
Me levanté temblorosa, empapada en el sudor frío que envuelve mi cuerpo, aún noto mi respiración acelerada. ¡Me encontraba tan sola! Me levanto con cautela, aún sigo en tensión, la horrible pesadilla que me atormenta cada noche está retenida en mis pupilas como si el monstruo que en ellas habita siguiera acechándome, no puedo apartar el miedo que siento, cada día me cuesta más levantarme, cada día me cuesta más vivir.
Los sueños siempre se cumplen, si no puedes en esta vida inténtalo en la siguiente, tienes toda la eternidad…
